EL PROBLEMA DEL SIGNIFICADO

“- Cuando yo utilizo una palabra, dijo Humpty Dumpty en un tono un poco despectivo, quiero decir lo que quiero
que signifique:
ni más, ni menos.-
El problema es, dijo Alicia, si podéis conseguir que las palabras signifiquen cosas tan diferentes.
- El problema, respondió Humpty Dumpty, está en saber quién manda -".

Lewis Carroll, A través del espejo.



Una mirada a los diccionarios que existen en la actualidad nos mostrará su casi inacabable variedad: diccionarios monolingües y plurilingües, generales y particulares, ordenados alfabéticamente y por familias, los que van de la palabra a la idea y los que van de la idea a la palabra. Pero también los diccionarios son, sin duda, cementerios de palabras, siempre retrasados con respecto a la realidad, siempre incompletos, siempre girando en torno a ellos mismos en círculos viciosos.

Un diccionario no será nunca perfecto porque el uso del lenguaje se manifiesta en una variedad casi sin límites. Si dices “ven”, iré, sabré que me necesitas o que no quieres verme, dependiendo del contexto o la entonación. Podemos incluso cambiar la finalidad del lenguaje y conseguir que nuestras palabras resulten engañosas o vacías de significado, como muy bien saben algunos políticos o abogados.

La mayor subversión consiste en modificar de manera planificada los significados. De este modo, “tortura” se transforma en “terapia” y “campos de extermino” en “campos de concentración”. Como en estos ejemplos, muchas veces las palabras modifican su significado al servicio de una “causa” política o religiosa. La historia deja su impronta en las palabras.

La mayoría de las palabras que usamos actualmente son el resultado de siglos de cambios en el significado, en el uso, en la pronunciación, en la escritura. Las palabras son como seres vivos: nacen, crecen, se reproducen, se transforman. Muchas mueren, otras renacen.

Resulta muy interesante rastrear el camino de la palabra para llegar, en la medida de lo posible, a su significado originario. Buscar el significado prístino de una palabra, antes de que el uso de siglos y de millones de hablantes dejaran su huella, resulta fascinante.

Las etimologías de palabras usadas en el ámbito del mar, que tan incomprensibles parecen a veces, nos revelan, en muchas ocasiones, aspectos de la realidad percibidos hace cientos de años y que ahora nos quedan ocultos por el uso. Resulta una
aventura maravillosa descubrir de dónde vienen las palabras que usamos. Conocer los significados de las palabras nos permite dominarlas. Y si dominamos las palabras, nadie, aunque mande, podrá manipularlas.

jueves, 11 de abril de 2013

Estratificación


Del latín “estratus” que significa “capa”. En geología, es la disposición de las capas o estratos de un terreno, en el medio marino también se usa para referirse a niveles de organismos vivos. 

sábado, 2 de marzo de 2013

Anfípodo

Del griego “ANFI”, que significa “por ambos lados”, y “POIS, PODOS” que significa “piés”. O sea, “pies por ambos lados”. Actualmente, reciben la denominación de anfípodos cierto tipo de crustáceos.

domingo, 17 de febrero de 2013

Escoriáceo

Del griego “SKOR” que significa “excremento”. Se aplica al resultado del enfriamiento rápido de una corriente de lava o a la acumulación de material poroso expulsado por un volcán.

Críptico

Del griego “KRIPTO”, verbo que significa “ocultar”. Se usa en biología marina para referirse a organismos que viven escondidos en el sustrato o entre otros seres vivos.

sábado, 19 de enero de 2013

Íctico

Del griego “iktus” que significa “pez”. O sea, relativo a los peces. Por ejemplo, la palabra ictiofauna hace referencia a todos los peces.

  

Hermafrodita

Del dios griego “Hermes” y la diosa “Afrodita”. Es el organismo con órganos reproductores masculinos y femeninos.

Biogénesis

Del griego “BIOS” que significa “vida” y “GENNAO” verbo que significa “engendrar”. O sea, “que engendra la vida”.